Benelli Mosell en el Auditorio con Tchaikovsky

Vanessa Benelli Mosell es italiana y pertenece a la última generación de pianistas jóvenes con una gran técnica. Mosell cumplirá los 30 en noviembre y debutó discográficamente en la casa DECCA con un álbum en el que reunía obras de Stockhausen y Stravinski, una combinación difícil y que exige una gran técnica y calidad de sonido.

No es extraño si pensamos que la pianista fue la última alumna de Stockhausen, y fue Mikhail Voskresenskycon, con quien estudió tres años en el Conservatorio de Moscú, quien la animó a trasladarse a la capital rusa. «Stockhausen ha sido mi mentor. Ha influido en las elecciones de mi vida y en mi repertorio musical-declara la pianista. Me estoy dedicando al novecientos, de su música más histórica a la más contemporánea y a Rachmaninov, que estudió en el mismo conservatorio que yo».

Más tarde siguió estudiando en Londres, en el Royal College of Music, para después continuar su vida en París.

El 21 de noviembre llega al Auditorio Nacional de Madrid para interpretar el Concierto para piano y orquesta nº1 de Tchaikovsky .

En el concierto también podrá escucharse la Tercera de Schumann «Renana» y la Obertura de Tannhaüser de Wagner, interpretadas por la Orquesta Clásica Santa Cecilia bajo la dirección del maestro alemán Moritz Gnann, actual director asistente de la Boston Symphony Orchestra.

Los precios para este concierto van desde los 28 a los 56 euros, y puedes comprar las entradas pinchando aquí.

Además se programa un concierto especial en la Sala de Cámara del Auditorio Nacional de Música de Madrid el 18 de noviembre a las 19:30 dedicado a los Grandes Adagios de la Música de Cine, piezas inmortales y muy conocidas que han sido utilizadas como bandas sonoras de destacadas películas. Sonarán piezas como el Concierto de Brandemburgo núm. 3 de Bach empleado en la estremecedora película Hannibal; la Sinfonía núm. 5 en do sostenido menor, Adagietto de Mahler que acompañó la decadente historia de amor imposible entre Gustav von Aschenbach y el joven Tadzio en Muerte en Venecia; el Adagio de Barber en la bélica Platoon; el Intermezzo de Cavalleria Rusticana de e Mascagni en El Padrino y muchos otros. La fórmula de combinar música y cine, exclusiva de Fundación Excelentia, obtiene siempre buenos resultados y hace que muchos aficionados se introduzcan en el mundo de la música clásica con facilidad. Para hacerla aún más atractiva, en el descanso del concierto, Excelentia invita a una degustación de vinos de las bodegas Masaveu.

La pianista presentando el Concierto para piano nº 2/ Variaciones Corelli, de  Rachmaninov