Tenores, sopranos, batutas,
directores de escena… tendrán el rabillo
del ojo puesto en Oviedo durante
el fi n de semana. No se celebra
ningún estreno, ni se espera un nombramiento,
pero sí se fraguan los resultados
de unos galardones cuya
repercusión será inevitable por únicos:
los Premios Líricos Teatro
Campoamor, que reconocerán lo
mejor de la temporada operística en
diez categorías: dirección musical,
dirección de escena, nueva producción,
cantante masculino y femenino
de ópera, cantante de zarzuela, actriz
o actor de zarzuela y premio especial
(a toda una carrera o institución).
Inés Argüelles, directora de la
Fundación que otorga las estatuillas
y los 12.000 euros que acompañan a
cada una, reconoce que la respuesta
a esta iniciativa del Ayuntamiento
ovetense ha sido triunfal: «Nos han
contestado las principales instituciones
que se dedican a la lírica en este
país, que no quiere decir que sean
muchas». O lo que es lo mismo: coliseos
(El Real, la Zarzuela, El Liceo,
la Maestranza, el Calderón de Valladolid,
el Villamarta de Jerez, el Mozart
de La Coruña, el Gran Teatro de
Córdoba…) y también festivales (Las
Palmas, Santander, la Quincena
Musical Donostiarra…). Argüelles
achaca la acogida a esa falta de reconocimientos
nacionales en este
C . David Carrón
El Campoamor falla
sus primeros
Premios Líricos
campo: «Creo que hay una visión
desenfocada con respecto a los reconocimientos,
pues se cree que la
parcela estaba cubierta con los premios
de canto, pero no se había pensado
en galardonar una temporada»,
indica. La ex gerente del Real no
teme que los premios acaben dominados
por los dos grandes coliseos:
«No compiten los teatros, sino los
artistas. Y hay grandes nombres que
actúan, por ejemplo, en festivales
que apenas tienen unos días de duración
», subraya Argüelles al tiempo
que anuncia cierto equilibrio entre
españoles e internacionales.
Gala con Sagi. El fallo, que se conocerá
mañana, surgirá de la deliberación
de algunos de los principales
críticos de nuestro país: «En este
mundo tienes que tener unos conocimientos
técnicos muy específi cos.
No puede juzgar cualquiera de la
calle –justifi ca Argüelles la elección
de críticos como miembros del jurado–.
Habría sido posible incluir a
directores o artistas, pero nos pareció
que era gente demasiado implicada
en la vida de la lírica». Los triunfadores
desfi larán por el coliseo ovetense
a fi nales de junio durante una galaconcierto
nada ortodoxa que dirigirá
Emilio Sagi: «Es natural, por su talla
artística y por el amor que tiene a su
ciudad, que se lo encargásemos a
él.Tiene intención de preparar un
acto muy sobrio de entrega y dar el
ÓPERA
Inés Argüelles posa en la Plaza de Oriente, detrás, el Teatro Real del que fue gerente