Suscribirse a la Newsletter de Beckmesser

¡No te pierdas ninguna noticia!

¡No enviamos spam! Lee nuestra política de privacidad para más información.

Busca las entradas de cada mes

Últimas 20 entradas

Últimos tuits de Beckmesser

Onofri-OBS-gloriosamente-nuevoCrítica: Orquesta Barroca de Sevilla. Furor y delicadeza
igor-levitCrítica: Igor Levit, personal, concentrado y elevado
Por Publicado el: 10/06/2021Categorías: En vivo

Crítica: Noche de ovaciones, plenitudes y desmesuras con Plácido Domingo

Noche de ovaciones, plenitudes y desmesuras

Gala “Voces responden”. Plácido Domingo, Ainhoa Arteta, Lucero Tena, María José Siri, Jorge de León, Virginia Tola, Nicholas Brownlee, Marina Monzó y el guitarrista Pablo Sáinz Villegas. Orquesta Clásica Santa Cecilia. Mº Josep Caballé Domenech, director. Auditorio Nacional. Madrid, 9 de junio de 2021.

Hay que agradecer a Javier Martí y la Fundación Excelentia la recuperación de Plácido Domingo en los escenarios españoles con una gala a beneficio de la Cruz Roja. No se a quien pertenecerá la idea, pero ha resultado todo un acierto sobre el papel y en los hechos. Ninguno de los artistas participantes se podrá quejar del calor con el que fueron recibidos. Nada menos que 35º fuera del Auditorio Nacional y cerradas ovaciones dentro. Artistas, casi todos en plenitud, que se merecieron esas muestras que empezaron para otra persona. La llegada de la presidenta Díaz Ayuso fue todo un espectáculo desde su bajada del impresionante Audi. Fotógrafos por doquier y unos aplausos que no tuvieron nada que envidiar a los que suelen acompañar a la Reina emérita cuando visita el Auditorio. Sin duda Madrid está con ella. Luego se la vio disfrutar durante el espectáculo, visiblemente con unas actuaciones más que con otras. Por supuesto con Plácido, pero muy especialmente con Lucero Tena y Pablo Sáinz Villegas. Se adelantaba a la barandilla de la primera fila de anfiteatro como para disfrutarlos más.

gala-regreso-placido-excelentia

Saludos finales

 

Tras un rutinario preludio de “Carmen” salió el tenor al escenario. La ovación, de más de dos minutos, fue antológica. La encontraran en youtube. A Plácido le han perdonado todo sus madrileños, si es que alguna vez hubo algo que perdonar. El gran artista que es se merecía este desagravio. Empezó dubitativo, emocionado por la recepción, en la comprometida página “Nemico della patria” de “Andrea Chenier”, con algunos desajustes en una orquesta que sonó con más volumen del adecuado. Resultó curiosa, por extraña, la atención que el tenor reconvertido a barítono prestó a todas las partituras que abordó, piezas que ha cantado montones de veces. Incluso así se le escapó alguna que otra sílaba. Lógico, por otro lado, cuando ya ha sobrepasado los ochenta años. Pero Plácido es un inexplicable milagro. Lo dio todo en un programa baritonal exigente: el citado Giordano; el largo dúo de “Traviata” con una admirable María José Siri, el también amplio dúo segundo entre Fiesco y Simon Boccanegra -lo que mejor cantó- con el vozarrón de timbre muy atractivo del bajo  Nicholas Brownlee, de quien seguro oiremos hablar en el futuro; el menos logrado dúo entre don Álvaro y don Carlos de “Forza del destino” junto a un pletórico Jorge de León y un muy mejorable “Dúo de la Africana” con Virginia Tola, en el que ambos fueron sepultados por la orquesta. Pero una vez más se cumplió el refrán “quien tuvo y retuvo…” porque, cuando nos brindó la propina “Por el amor de una mujer” de “Luisa Fernanda” -sin duda un detalle intencionado a la suya-, dio toda una lección del fraseo que siempre hemos admirado y prácticamente nadie ha superado. El resto de las propinas, eternas tras aplausos y vítores que no cesaban, fueron desmesura en las más de dos horas y media sin descanso.

Una vez más quedó clara la especial conexión que Ainhoa Arteta tiene con el público en una buena ejecución del aria final de Leonora de “Forza”, con pianos sobresalientes, y el excelente momento de Marina Monzó. Sin embargo, quienes más se llevaron el gato al agua fueron Pablo Sáinz Villegas y Lucero Tena en unas actuaciones de técnica y expresión endiabladas. Lo del primero es explicable, lo de Lucero no. ¿Cómo aún puede tocar así? El público se puso en pie como no podía ser de otra forma.

Dos horas y media -más con todas las propinas-  con un programa muy bien diseñado, con páginas de las que atraen a cualquier público y con unos artistas en plenitud vocal o de sabiduría, que nos hicieron disfrutar de verdad a todos los que llenábamos el Auditorio. ¡Gracias, Excelentia!

Ahora es imprescindible la vuelta de Plácido al Real -¿podría ser en alguna de las representaciones de “Nabucco” la próxima temporada?- y en esa Zarzuela, donde le escuchamos en 1968, con una gala centrada en el género. Por favor, no me digan que lo impiden los ministerios de Podemos. Gonzalo Alonso

 

Aquí su propina «Por el amor de una mujer…»

 

 

 

 

2 Comments

  1. Manuel Cabrera Manzanares 11/06/2021 a las 15:08 - Responder

    Disfruto con la bilis que tiene que estar deglutiendo el cateto del Ministro de Cultura y las lumbalgias que estarán sufriendo los rectores del Teatro Real y del Teatro de la Zarzuela, por doblegarse a semejante ignominia del mal trato ministerial, cuando recibió el veto de ambos templos líricos, tras haber escupido en La paño que tantas noches de gloria les ha regalado.

    Desde la humildad de estas líneas solicito a S.M. El Rey de España, Felipe VI, que, utilizando el derecho de gracia que constitucionalmente tiene, le conceda, a titulo personal no hereditario, el titulo de Duque de Guetaria, con nobiliaria Grandeza de España.
    ¡¡¡ QUÉ MENOS !!!

  2. Manuel Cabrera Manzanares 11/06/2021 a las 15:10 - Responder

    … “escupido en la mano” … mis disculpas.

Deja un comentario Cancelar la respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

banner-calendario-conciertos

calendario operístico 2023