El Festival Atrium Musicae 26 convierte Cáceres en punto de encuentro musical
Del 28 de enero al 2 de febrero, la cuarta edición del festival Atrium Musicae Cáceres recorrerá la región con más de una decena de conciertos en espacios patrimoniales de Coria, Trujillo, Cáceres, Garrovillas de Alconétar, Malpartida y Plasencia. Figuras internacionales como Benjamin Alard, Javier Perianes, Mario Brunello, Florian Boesch o Jorge Pardo comparten cartel con destacados intérpretes españoles, en un viaje que va del Renacimiento al siglo XXI.

Javier Perianes, uno de los platos fuertes de Atrium Musicae 26
El festival Atrium Musicae Cáceres celebra su cuarta edición con una programación que confirma su crecimiento y su proyección nacional e internacional. Del 28 de enero al 2 de febrero de 2026, el certamen se expandirá por la geografía extremeña con 16 conciertos en siete ciudades y espacios singulares, desde las catedrales de Coria, Plasencia y Cáceres hasta el Museo Helga de Alvear o el Gran Teatro de Cáceres.
El ciclo vuelve a situar el diálogo entre patrimonio, investigación histórica e interpretación contemporánea en el centro de su propuesta, reuniendo a intérpretes de primer nivel mundial. Entre ellos destacan el organista Benjamin Alard, el pianista Javier Perianes, el violonchelista Mario Brunello, el barítono Florian Boesch, el jazzista Jorge Pardo, o la soprano extremeña María Espada, junto a formaciones emblemáticas como El León de Oro, Schola Antiqua, Neopercusión o el Lituus Quartet.
El festival se inaugura el miércoles 28 de enero en la Catedral de Coria con el recital Ostinato y Tenuto del organista Benjamin Alard, figura de referencia internacional en la interpretación histórica del repertorio barroco. Su programa, con obras de Muffat, Pachelbel, Couperin y Bach, dialoga con el órgano de José Verdalonga (1806), uno de los instrumentos más valiosos del patrimonio extremeño.
Al día siguiente, el jueves 29, la música viajará a Trujillo con la soprano María Espada y el laudista Manuel Minguillón, que ofrecerán el programa Esperar, sentir, morir, un puente entre el barroco italiano y el hispano a través de Monteverdi, Merula, Mazzocchi e Hidalgo. Ese mismo día, el sonido del metal tomará Cáceres con el Lituus Quartet, seguido por el esperado concierto de Mario Brunello y la pianista Yulianna Avdeeva en el Gran Teatro, dedicado a Shostakóvich y su entorno creativo.
El viernes 30 de enero, el mediodía se llenará de resonancias barrocas con el recital del trompetista Manuel Blanco y el organista Pablo Márquez en la Concatedral de Santa María, donde Bach, Buxtehude, Haendel o Mozart convivirán con una obra contemporánea del propio Márquez. Por la tarde, el Museo Helga de Alvear acogerá dos sesiones de Jorge Pardo, que explorará la improvisación jazzística entre el flamenco y el mestizaje sonoro.

El organista Benjamin Alard
Fotografía: Sandra Polo
El pianista Javier Perianes cerrará la jornada con #Falla2026. Diálogos imaginarios, un homenaje al 150 aniversario del compositor gaditano. Falla dialogará con Chopin y Albéniz en un programa que vincula el romanticismo europeo con el alma española.
El sábado 31 se alzará como el eje espiritual del festival con la monumental interpretación del Officium Defunctorum de Tomás Luis de Victoria, a cargo de El León de Oro y Schola Antiqua, bajo las direcciones de Marco Antonio García de Paz y Juan Carlos Asensio. Ese mismo día, Alard ofrecerá un segundo recital en el histórico órgano de Garrovillas de Alconétar, centrado en la tradición ibérica del tiento y la fantasía.
La tarde continuará con Juanjo Guillem y Neopercusión, que presentarán en el Espacio de la Creación Joven El hundimiento del Titanic de Gavin Bryars, junto a estudiantes del Conservatorio Hermanos Berzosa. La jornada culminará con el recital de Florian Boesch y Malcolm Martineau, que interpretarán el Schwanengesang de Schubert, antes del Concierto de Medianoche, una experiencia de canto gregoriano a cargo de Schola Antiqua, que transformará la Concatedral en un templo de silencio y resonancia.
El domingo 1 de febrero, la jornada comenzará en la Iglesia de Santiago con el proyecto Contrafacta, que une la polifonía de Victoria con obras contemporáneas de Lorenzo Donati, Morten Lauridsen o Arvo Pärt, interpretadas por El León de Oro. Más tarde, el Museo Vostell de Malpartida acogerá el programa Bach Fluxus IV de Mario Brunello, que une las suites de Bach con la sonata de Weinberg en homenaje a la estética experimental del museo.
El domingo también será turno de Perianes, con un segundo concierto en el Gran Teatro de Cáceres, pero en esta ocasión dedicado a Viena y autores que encontraron en la capital austriaca su punto de desarrollo artístico. Brahms, Schubert y Mozart se encontrarán en las manos del reconocido pianista español.
El broche final llegará el lunes 2 de febrero en la Catedral de Plasencia, donde la violinista Miriam Hontana y el organista Daniel Oyarzabal interpretarán un diálogo entre Bach y Vivaldi, cerrando el festival con el brillo barroco del Invierno de Las cuatro estaciones y la monumental Ciaccona de Bach.


























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