Plan de suscripciones

Suscribirse a la Newsletter de Beckmesser

¡No te pierdas ninguna noticia!

¡No enviamos spam! Lee nuestra política de privacidad para más información.

Busca las entradas de cada mes

Últimos tuits de Beckmesser

Kirsten FlagstadHistorias musicales: La diva cancelada y el odioso diplomático
Historias musicales: “Yerma”, la ópera de un “caníbal”, por fin se estrenará en España
Por Publicado el: 05/09/2025Categorías: Colaboraciones

La temporada 2025/26 de la OSG: Anuntio vobis…

La temporada 2025/26 de la OSG: Anuntio vobis…

Anuntio vobis…

La Orquesta Sinfónica de Galicia (OSG)

gaudium magnum. Con todas las reservas que impone la prudencia, sí; pero gaudium al fin. Tras meses de “sede vacante” por la dimisión del anterior gerente; tras el necesario periodo de incorporación de un directivo foráneo (solamente, que ninguna persona hispanoamericana es ni debería ser considerada extranjera en España y menos aún en Galicia),habemus procurator”; tenemos gerente.

Sé que su nombramiento no es ya noticia y la presentación de la temporada 2025-2026 no lo es fresca, pero prefiero comentarlo todo ahora, con reposo, con perspectiva. Juan Antonio Cuéllar ha llegado a lo que muchos valoramos como buque insignia de la cultura de A Coruña -e incluso de Galicia junto a la Real Filharmonía, la orquesta hermana con sede en Santiago- cuando aquella estaba a punto de naufragar.

Han sido los últimos quince o veinte años una época turbulenta: años de abandono por parte de instituciones cuyos responsables llenan su boca en cualquier discurso medianamente inaugural de elogios y aun de ditirambos, venga o no a cuento. Pero que, mientras, hacen dejación de sus responsabilidades más elementales, como el cumplimiento de las obligaciones de pago firmadas en un convenio, generando una deuda histórica de considerables dimensiones.

Años de desinterés de sus responsables más directos -de la más directa, más bien- que solo coincide con la orquesta en el Palacio de la Ópera -cuyas malas condiciones y lamentable estado son bien conocidos- en presentaciones como la del martes 2, sin que nadie conocido haya siquiera detectado su presencia en algún concierto de la orquesta fundada y sostenida por el Ayuntamiento que preside.

Y lo que es más grave: que es quien ostenta la presidencia del Consorcio para la Promoción (que no prevención como casi se le escapa en un curioso acto fallido de su discurso del martes; está grabado) de la Música. Y por tanto, la única persona con la potestad de convocar un Pleno del órgano correspondiente en el que puedan discutirse y negociarse las aportaciones de todo tipo necesarias para la buena marcha -en los últimos tiempos, directamente, para la supervivencia- de esa orquesta de la que todos dicen en sus discursos estar orgullosos.

Mención aparte merece la Diputación Provincial da Coruña, que siempre aporta sus esfuerzos pese a sus menores posibilidades.

Tras los discursos de los responsables políticos y muy especialmente de la exposición del nuevo gerente de la Sinfónica, cabe esperar una posible salida de la peor situación que ha vivido la orquesta desde su fundación si excluimos, claro, las “turbulencias” que casi abortan su nacimiento en el verano de 1992.

La temporada 2025/26 de la OSG: Anuntio vobis…

Acto de presentación de la temporada 2025/26 de la OSG

Impedir el naufragio

Que tal era la situación de la OSG a la llegada de Cuéllar: un proyecto que hacía aguas, dejado y abandonado por algunas instituciones y sin nadie al timón capaz de marcar y mantener el rumbo adecuado. Ni de lograr ayuda externa con una estrategia que hiciera atractiva al sector empresarial su colaboración por los beneficios que lograría de su patrocinio; y menos aún de salir a la calle a defenderlo y “venderlo”. Solo quejas por la deuda histórica, por la falta de liquidez… En fin, agua pasada que no mueve molino.

Es sabido que a mediados de 2025 la situación de tesorería no permitía afrontar la contratación de solistas y directores invitados para el último trimestre del año y primero de la temporada. Menos lo es que, por encima de esto, había un déficit de alrededor de doscientos mil euros. Que tal era la deuda que tenía contraída el Consorcio con solistas, directores invitados, colaboradores y proveedores.

Si, como se dice, los incendios forestales del verano se apagan en invierno, el depósito de combustible para poner en marcha la que parecía imposible programación para la temporada -otoño, invierno y primavera- se ha llenado en verano. Y lo ha hecho Juan Antonio Cuéllar con una acumulación de horas de trabajo, visitas a instituciones, diálogo con los músicos, diálogo y negociación con agentes artísticos de solistas y directores.

Mirar hacia el futuro

No sé si, como me decía un músico de la orquesta después de la presentación, no es tiempo de mirar atrás y pedir responsabilidades. Posiblemente las hay y de varios tipos, como políticas o de gestión. Lo que sí es cierto es que sí son días de mirar hacia adelante con fuerza y fe: en los músicos, en la estructura, en la gerencia. Y no digamos de los abonados y público de la Sinfónica. Y con esperanza -eso que se pierde siempre en último lugar, pero que, gracias a acciones y omisiones de tantas personas involucradas, se pierde demasiadas veces. Esperemos que no suceda en esta. Inshallah!

Es de destacar el despliegue didáctico aprovechando la fuerza hacia el mañana, con el programa Son Futuro. La Joven Orquesta de la OSG, a la que se le asegura que tendrá tres encuentros en enero, abril y agosto. Los dos grupos de la orquesta infantil, liderados por Enrique Iglesias y Jorge Montes, el coro infantil y el Coro Joven, con más de 120 miembros en total.

Si, como decía Víctor Pablo Pérez en la última entrevista que concedió como titular de la OSG, cada miembro de estas formaciones arrastra tras de sí una pequeña multitud de familiares -padres, hermanos, abuelos, tíos, primos- el impacto cultural positivo sobre la comunidad que sostiene y sustenta a la orquesta es, sencillamente, enorme y profundo.

En palabras del nuevo gerente del Consorcio y de la OSG, todo se ha hecho “desde el esfuerzo colectivo de Ayuntamiento, Xunta y Diputación y, por supuesto, nuestro trabajo en la orquesta haciendo una revisión exhaustiva de las posibilidades de poder hacer lo más que podamos con lo que tenemos y el resultado colectivo, donde hemos estado involucrados con el Comité de Empresa y el comité Artístico”.

Cuando una cifra es amor

Declara Cuéllar que gracias a la Diputación “hemos podido imprimir los folletos que tienen en sus manos [acordeón con la programación de la temporada]; y gracias a la cortesía de la Imprenta de la Diputación vamos a tener los programas de mano para cada uno de los conciertos. Y así, encontrando apoyo, oportunidades y, aliados”, se ha ido taponando la vía de agua producida bajo la línea de flotación de la Sinfónica de Galicia.

Destacó como tales Cuéllar a “los agentes de los artistas, que han colaborado a que los cachés se redujeran al punto en que podríamos asumirlos”, gracias a lo cual la temporada va a estar “llena no solo de grandes artistas, sino del amor de todos ellos por la Sinfónica de Galicia”.

Desde luego, algo o mucho de ese amor, derivado de la memoria de sus colaboraciones, habrán valorado artistas cuando han rebajado sus cachés en un 40 %. Rebaja que ha permitido elaborar un programa con más que notables solistas y directores invitados y un repertorio clásico y romántico en su mayoría; que no están los tiempos para derrochar en pagos por derechos de autor cuando el objetivo esencial es la supervivencia cuadrando cuentas hasta el último céntimo.

Y finalmente, pero no menos importante -“last but not least”, que dicen los angloparlantes- una gira por los más importantes escenarios de Gran Bretaña: la primera de la orquesta por el extranjero después de 10 años. Y con viajes y estancia en GB pagados por la organización. ¿Quién decía que no era posible y que siempre había que pagar por hacer giras?

Julián Carrillo Sanz

Deja un comentario

banner-calendario-conciertos

calendario operístico