La OCG, en compañía de su Joven Academia, aborda la Tercera sinfonía de Mahler. Bajo las órdenes de Lucas Macías, y con la participación de la mezzosoprano canadiense Emily D’Angelo, el Coro de la Orquesta Ciudad de Granada y el Seraphim Pueri Cantores de la Catedral de Granada, la formación andaluza aborda una de las obras más monumentales de la historia de la música. 

Emily d’Angelo

Los días 17 y 18 de octubre, la Orquesta Ciudad de Granada aborda una de las obras más destacadas del repertorio sinfónico de Mahler: su Tercera sinfonía. Esta partitura, una de las más impactantes y de mayores dimensiones de la trayectoria del mencionado compositor, aborda textos procedentes de Des Knaben Wunderhorn de Clemens Brentano y Achim von Arnim. La colosal orquestación y requerimientos corales de sus noventa minutos (aproximados) se empeñan en una profunda y aguda meditación sobre la naturaleza, la condición humana y sus anhelos de divinidad.

De alguna manera, complementa el discurso de la “Resurrección”, objeto la sinfonía precedente, y representa el punto culminante del pensamiento sinfónico del joven compositor, que anda por la treintena cuando la compone, entre 1893 y 1896. Mahler imagina la Tercera como una representación sonora del desarrollo del mundo y de la conciencia, como una especie de evolución espiritual “desde lo inanimado hasta Dios”.

Para esta ocasión, la OCG contará con la participación de su Joven Academia, formando así una gran orquesta de más de cien músicos. Bajo las órdenes del titular de la formación, Lucas Macías, el Auditorio Manuel de Falla recibe a la mezzosoprano canadiense Emily D’Angelo, quien interpretará las secciones para solista, así como al Coro de la Orquesta Ciudad de Granada y los Seraphim Pueri Cantores de la Catedral de Granada.