El jueves pasado cumplió 72 años Miguel Zanetti, uno de nuestros grandes pianistas acompañantes. Hasta hace poco aún podíamos verle sobre un escenario. Ahora le seguimos viendo en uno de los palcos del Teatro de la Zarzuela, desde donde disfruta del Ciclo de Lied, de los cantantes y de los pianistas que les acompañan.
Miguel Zanetti, madrileño por nacimiento, estudios y residencia, inició sus primeros pasos bajo la tutela de José Cubiles y Federico Sopeña. Fue a partir de finales de los años cincuenta cuando decidió enfocar su carrera no como solista sino acompañando a cantantes y a través de la música de cámara. Estas elecciones son siempre difíciles, puesto que el anhelo habitual es el de brillar con estrella propia, pero acertó. Zanetti hizo música con Lorengar, Kraus, Seefried, Schwarzkopf, Procter, Stich-Randall, Estes, Scotto, Obraztsova, Caballé o de los Ángeles. En estos meses se publican discos inéditos de recitales con estas dos últimas artistas. Junto a ellos y con ellos tocó en las principales salas del mundo e hizo muchos amigos entre sus colegas de profesión especializada. Geoffrey Parsons o Gerald Moore le tuvieron en gran aprecio y Andrea Seebohn llegó a escribir de él en el Kurier vienés, en 1973, «Aquí está el verdadero continuador de Gerald Moore».
Colaboró también con Ferras, Accardo, Rampal, Ricci, etc, intervino en más de mil seiscientos cincuenta recitales, grabó más de sesenta trabajos, algunos con premios internacionales… y no se ha olvidado de transmitir sus conocimientos a la posteridad, vinculándose a la Escuela Superior de Canto de Madrid desde su creación y hasta el verano de 2006, fecha en que se jubiló.
En 1995 se le concedió la Encomienda de Isabel la Católica, pero muchos esperamos que el Ayuntamiento y la Comunidad madrileña tengan sensibilidad para homenajear a uno de sus hijos musicales más preclaros. Sra. Aguirre, Sr. Ruiz Gallardón y también Sr. Molina, no dejen pasar la oportunidad.

Gonzalo Alonso