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Por Publicado el: 10/01/2008Categorías: Artículos de Gonzalo Alonso

Dobles parejas

Dobles parejas

Hace cinco décadas había dos parejas que triunfaban: Callas con Di Stefano y Tebaldi con del Monaco. Era una competencia que aportó mucho a la música. Pasaron dos décadas y aparecieron otras dobles parejas: Sutherland con Pavarotti y Caballé con Domingo primero y luego con Carreras. De las cuatro han quedado muestras discográficas admirables: «Tosca», «Otello», «Beatrice di Tenda», «Aida» o «Ballo in maschera» son realidades imborrables.

Hace una década surgió otra pareja que, en el mundo actual del marketing, dio más que hablar que auténticos frutos artísticos. Angela Georghiou y Roberto Alagna empezaron muy fuerte, pero poco a poco se fueron desinflando, siendo causa principal de ello sus caracteres y la ampliación de sus repertorios con obras poco adecuadas a sus características. Pero ahí siguen. Si la soprano rumana se dio a conocer de la noche al día con una «Traviata» en Londres, la misma ópera serviría para el lanzamiento internacional de Anna Netrebko, quien ya había encontrado pareja artística en Rolando Villazón. «Romeo y Julieta» o la citada «Traviata» salzburguesa son ejemplos de ambas parejas.

Hay muchas similitudes en los casos citados, pero también claras diferencias. Hoy criticamos que Alagna o Villazón aborden obras que no deberían, pero si bien Tebaldi, Sutherland, Caballé, Monaco, Pavarotti y Domingo fueron bastante coherentes en sus repertorios, también es cierto que Di Stefano, nacido para «Elixires», «Sonámbulas» o «Manones» muy pronto se deslizó hacia «Cavallerias» y hasta acabó con «Otello».

La historia siempre se repite, pero hay una diferencia que no puede pasarse por alto: cuando Carreras cantó Radamés con Karajan en Salzburgo, del Monaco habló de «Nemorino a Tebas», ¿Acaso no le ha sucedido otro tanto a Alagna en la Scala? ¿Y qué hay de las pretensiones de Alagna y Villazón de abordar «Otello» con justificaciones que falsean de lleno la historia? Ahora ambos están en crisis. ¿Acaso Netrebko es Callas, Sutherland o Caballé, aunque deslumbren sus piernas? No nos engañemos.
Gonzalo Alonso

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