Critica: segundo acto de Tosca, con Netrebko, para el recuerdo
TOSCA (G. PUCCINI)
Teatro Real de Madrid. 21 Julio 2021
El Teatro Real ha programado la terminación de la actual temporada de ópera con unas representaciones extraordinarias de Tosca, ya que se han añadido 4 con la presencia de dos divos indiscutibles de la actualidad, como es el caso de Anna Netrebko y Jonas Kaufmann. No solamente se trata de su presencia en estos repartos, sino también del hecho de que se trata casi del debut de estos artistas en el Teatro Real, donde hace nada menos que 20 años que actuaron por una única vez y después no han vuelto sino para actuar en recitales o conciertos.
Obviamente, el público ha respondido como cabía esperar a la presencia de estos dos artistas, agotando las localidades tan pronto salieron a la venta, a pesar de que los precios eran claramente superiores a los habituales.
La representación que nos ocupa ha ofrecido un reparto totalmente nuevo respecto de toda la serie de las anteriores, ya que a la presencia de la gran diva rusa se une la de su marido Yusif Eyvazov y la del barítono italiano Luca Salsi. El resultado de la representación ha sido bueno, destacando particularmente un segundo acto magnífico, de los que pueden quedar para el recuerdo de los aficionados.
Vuelve a ofrecerse la producción ya comentada anteriormente de Paco Azorín y su personaje de la Revolución y no tengo nada que añadir a lo ya comentado en ocasiones anteriores. Sigo considerando que se trata de una producción que no aporta ningún interés especial.
Repite también en la dirección musical el italiano Nicola Luisotti, que ha vuelto a ofrecer una buena lectura, como ocurre siempre en su dirección de óperas de Verdi o Puccini.
Como digo más arriba, la novedad y el gran atractivo sobre el papel estaba en el escenario y particularmente en la presencia de la gran diva del momento, la soprano rusa Anna Netrebko, que encarnaba el personaje de Tosca. Como ya apuntado, era casi su debut en el teatro, ya que no había cantado ópera aquí desde el año 2001, cuando formaba parte de la Compañía del Mariinsky en la visita que hizo entonces con la ópera Guerra y Paz.
Tosca es un personaje que Anna Netrebko ha añadido a su repertorio de modo reciente, ya que lo debutó hace 3 años en el Metropolitan de Nueva York, habiéndolo cantando a continuación en la Scala, en Múnich y en Viena, por citar solo teatros de primer nivel. Su actuación ha sido la que cabe esperar de una gran artista, habiendo destacado de manera indudable en el segundo acto, donde ha hecho una interpretación magnífica de principio a fin. Buena también su prestación en los otros dos actos, pero menos brillantes por su parte en mi opinión, dando a veces la impresión de estar todo poco ensayado. Brindó una estupendo Vissi d’arte, que fue recibido con una gran ovación de casi 3 minutos de duración y que, a pesar de la insistencia del público, no se consiguió que la Netrebko concediera un bis del aria.
Su Cavaradossi ha sido interpretado por su marido, el tenor Yusif Eyvazov, que no cabe duda de que juega en otra liga que la diva, aunque siempre o casi siempre cantan juntos. El ruso tiene una voz adecuada para el personaje, aunque no particularmente bella y hay en su canto excesivos sonidos abiertos y engolados. Pasó sin brillo por Recondita armonia, ganándose una ovación del público en su aria del tercer acto. Positivamente, me llamó la atención su fiato y no mucho más.
La otra novedad importante del reparto era la presencia del barítono italiano Luca Salsi en el rol del Barón Scarpia. Se trata del más importante barítono italiano de la actualidad, que canta habitualmente el personaje, aunque no lo incorporó a su repertorio sino en los últimos 4 años. Su actuación me ha parecido magnífica, totalmente involucrado en el malvado personaje y dando gran sentido a todas sus frases. Su segundo acto con Anna Netrebko es de los de quedar para el recuerdo. No es de extrañar que la Scala haya decidido inaugurar la próxima temporada con el Macbeth de Verdi, que será interpretado por Luca Salsi y Anna Netrebko.
El resto de personajes eran los mismos que en las representaciones anteriores, a los que ya me referí, y no hay nada que añadir en esta ocasión.
El Teatro Real había agotado sus localidades y el público pareció disfrutar con el espectáculo, aunque no consiguiera arrancar el ya mencionado bis (últimamente, casi de tradición aquí).
La representación comenzó puntualmente y tuvo una duración de 2 horas y 28 minutos, incluyendo un intermedio y una breve parada entre los actos II y III. Duración musical de 1 hora y 54 minutos. Seis minutos de aplausos, particularmente intensos para Anna Netrebko y también para Luca Salsi.
En esta ocasión la localidad más cara costaba 428 euros. José M. Irurzun
Fotos: J. del Real
Gracias por la reseña.
Una pequeña aclaración sobre: “El ruso tiene una voz… ”
No es correcto llamar ruso a Eyvazov. Es de etnia azerbaiyana y ciudadano de Azerbaiyán. Estudió canto primero en Bakú y luego en Italia. Por tanto, tampoco es ruso en la escuela vocal.
El problema no es su nacionalidad, sino su mediocridad, es una lástima que Netrebko obligue a su público a soportar a este zapatero.
Me sorprende que no se haya publicado en Beckmesser la crítica de la representación de Tosca interpretada por Kauffmann
Hemos ido a la del 22. Saldrá