Pedro Salguero, exgerente de la Orquesta de Extremadura

La Fiscalía pide cárcel para Salguero

La Junta de Extremadura pide 15 años de cárcel para el exdirector gerente de la Fundación Orquesta de Extremadura Pedro Salguero por un delito societario, otro de apropiación indebida y un tercero de administración desleal.

La Fiscalía, por su parte, solicita tres años y diez meses de prisión por un delito de apropiación indebida, según el auto del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 1 de Mérida, que decreta la apertura del juicio oral.

Tanto la acusación particular como el Ministerio Público reclaman al acusado una indemnización de 111.695,56 euros en concepto de responsabilidad civil para la entidad perjudicada, la Fundación Orquesta de Extremadura.

Estos gastos nos justificados se produjeron entre febrero y julio de 2011, antes de que se diera desde la Junta orden al banco de que esas operaciones necesitaban también de la autorización del secretario general de la Consejería de Educación y Cultura.

De esa cantidad a devolver, 111.959,69 euros corresponden a los gastos propiamente dichos y 23.264,13 a los intereses legales generados.

Jose Antonio Monago, Presidente de la Junta de Extremadura, ha señalado sobre la petición de la Fiscalía que el PP «siempre muestra respeto a la Administración de Justicia», sin atender al color político (Pedro Salguero fue concejal del PSOE en Calamonte).

El presidente también ha recordado que Salguero ocupó el cargo de gerente del Festival de Teatro Clásico de Mérida y ha relatado que cuando él accedió a la Presidencia, en julio del año 2011, se encontró «un problemón porque no había contabilidad. Había un cúmulo de irregularidades que pusimos en conocimiento de la Justicia, porque cuando le pedí que me diera el estado de las cuentas del Festival de Teatro me dio un folio con el debe y el haber. No había contabilidad y tuvimos que nombrar un gerente, un subinspector de la Agencia Tributaria en comisión de servicio, que tuvo que poner en orden las cuentas», ha declarado Monago.

Los inspectores comprobaron que no se habían liquidado nunca los impuestos del Festival, como el de Sociedades, y no había control de la Administración sobre ese organismo, cuya directora técnica era por entonces la actriz Blanca Portillo.