Incitación a que los conserjes de Auditorio incumplan la ley de Gallardón
Lo último que se cuenat del Auditorio Nacional es que López López, director artístico del mismo, al ver que los espectáculos de programación propia constituyen un rotundo fracaso ha sido ordenar a los conserjes del centro que se recorriesen los alrededores repartiendo octavillas publicitarias. Los conserjes dijeron que esa tarea no entraba en sus obligaciones y los sindicatos les apoyaron. No repartieron las octavillas.
López López no había tenido en cuenta el contrato del personal, pero tampoco la nueva y polémica ley de Gallardón prohibiendo el reparto de ese tipo de publicidad. No se puede vivir en el limbo musical.
Claro que tampoco parece que vivan en él, porque ¡menuda desorganización la de alguno de los conciertos de Stockhausen! con un pianista que no sabía que hacer en el descanso. ¿Es que ya se ha olvidado lo que es una parrilla con todas las instrucciones del acto para el personal? ¿Qué es eso de mandar hoja tras hoja y con contradicciones entre unas y otras?
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