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Una tuerca floja en el Real
Por Publicado el: 05/11/2010Categorías: Crítica

Paisaje vienés

PtAISAJE VIENÉS​ 

​Obras de Schubert, Berg y Mahler. Mahler Chamber Orchestra. Malis Petersen, soprano. Director: Fabio Luisi. Auditorio Nacional. 2-11-2010. Conciertos y solistas extraordinarios, Juventudes Musicales.

​Fabio Luisi (Génova, 1959), que ha ocupado ya podios muy importantes, como el de la Staatskapelle de Dresde y la Ópera de la misma ciudad, ha demostrado en este programa tan vienés que es un maestro solvente, de sólidos conceptos, de gesto claro y bien dibujado, de controlado temperamento y de convincentes planteamientos expresivos. Cierto es que a la “Sinfonía Incompleta” de Schubert le faltó una línea constructiva más unitaria, cohesión y depuración sonora, sobre todo en los “tutti”. Lo que sobró en musculatura faltó en delicadeza en las transiciones, pero no deben negarse momentos muy logrados, sobre todo en el fraseo de las maderas, donde brilló el clarinetista Olivier Platy. El director empleó trompetas sin pistones, lo que proporcionó un curioso espectro tímbrico.

​El aria para soprano y orquesta “Der Wein” (El vino) de Berg, sobre poemas de Baudelaire, es, desde sus planteamientos seriales, obra de sugerente belleza, acorde con el erotismo del texto. Escrita para una soprano coloratura, tuvo una pálida servidora en Malis Petersen, de instrumento alicorto en centro y graves. Luisi, que hizo sonar con finura a la orquesta, no calibró las intensidades.

​Los mejor de la noche se dio en la “Cuarta Sinfonía” de Mahler, que es además especialidad del conjunto, ya no tan de cámara, porque en esta obra actuaron 74 músicos. La batuta planteó una versión llena de detalles, bien trazada, con excelente aplicación del glisando, descarada planificación de los vientos, claras texturas y acentuación de las disonancias; e instantes de notable refinamiento, como el de la intervención de la cuerda en “pianísimo”, justo antes del solo de trompa de la coda del primer movimiento. Nos gustó el modo de cantar el Andante, pausadamente expuesto, y la animación y cuidado con los que se acompañó a la solista, aquí, sí, entonada e idónea para el cometido: desarrollo de dos canciones de estilo infantil-popular.     Arturo Reverter

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