Alberto Vilar, mecenas en prisión
El mecenas cubano Alberto Vilar, presidente y fundador de Amerindo Investment Advisors, ha sido acusado de robarle $5 millones a un cliente y detenido sin fianza el día 26 de mayo en el Newark Liberty International Airport, tras regresar de una conferencia en Las Vegas. Según la acusación, los $5 millones del inversor fueron usados »como una cuenta de ahorro personal para pagar gastos personales y hacer contribuciones caritativas sin el conocimiento o autorización de la víctima». Amerindo perdió 17 por ciento este año tras haber ganando 24 por ciento el año pasado y 85 por ciento en el 2003. Entre el 2000 y el 2002, el fondo perdió más del 90 por ciento de su valor. Vilar, de 64 años, habría regalado más de $225 millones a grupos operísticos (John F. Kennedy Center en Washington, el Carnegie Hall, el New York Philharmonic, la Ópera de Vienna, el Covent Garden de Londres, la Maryinsky Ópera de St. Petersburg, Salzburgo, Bayreuth, Spoletto, etc), instituciones médicas y su universidad. Sin embargo parece ser que tales ayudas se materializaron sólo en una mínima parte y que el grueso de ellas estaba aún pendiente de recibir.
La fortuna de Vilar, clasificado el año pasado por la revista Forbes como el 327 americano más rico, se estimaba en unos $950 millones en diciembre del 2004.
El magnate no había logrado reunir la fianza de cuatro millones de dólares para poder abandonar la prisión y has sido pocos los amigos que han acudido en su socorro. En el 2002, cuando se produjo el presunto fraude, The New York Times publicó que Vilar estaba teniendo dificultades para cumplir sus compromisos financieros con diversos grupos artísticos y hasta se había retrasado en el pago de las hipotecas de sus casas vacacionales en Colorado. Lo cierto es que hasta a España llegaron sus supuestas aportaciones, donando sobre el papel al Liceo el sistema de subtitulación individual en cada butaca. El dinero nunca llegó y el Liceo decidió hace escasas fechas quitar el retrato de Vilar de sus programas de mano, al igual que tuvieron que hacer otras entidades culturales a lo largo y ancho del mundo.
Los posibles problemas con los patrocinios de Vilar saltaron a través de Washington y Nueva York hace un par de años. A la primera no le habrían llegado el millón de dólares comprometido para el programa Vilar/Domingo de jóvenes artistas. A la segunda los 700.000 $ para el concurso de nuevos directores. La situación creada fue tal que el propio Maazel habría tenido que poner dinero de su bolsillo para aliviar el problema. Domingo, entonces, no quiso hacer declaraciones.
Se trata de un duro revés para las artes, pues muchas de las citadas organizaciones aún confiaban en el cumplimiento de los compromisos por parte de Vilar. Ahora no tendrán más remedio que dotar las correspondientes provisiones de impagados. Una de las entidades más afectadas podría ser el Festival de Bayreuth, dado que Wolfgang Wagner recurrió a las subvenciones de Vilar para permanecer en el cargo de director, toda vez que el gobierno bávaro se había opuesto a su continuidad y amenezado con reducir su aportación. De prosperar la acusación -un ayudante del fiscal ha declarado que teme encontrarse «ante la punta del un iceberg»- Vilar podría ser condenado a diez años de cárcel.

Gonzalo ALONSO