Halffter estrena en Burgos
Lázaro echa a andar
Obras de Halffter y Falla. M.Rodríguez, M.Pardo, J.M.Ramón, R.Lojendio, V.Ombuena, E.Santamaría, A.García, n.Pomares, P.Sanz. Sociedad Coral de Bilbao. Dresdener Philharmonie. c.Halffter y R.Frühbeck de Burgos, directores. Teatro Princiapal. Burgos, 20 de septiembre.
El «Estío musical burgalés», ya en su octava edición, ha prestado desde sus inicios gran atención a la creación contemporánea. Han sido numerosos los estrenos, algunos por encargo expreso. En esta ocasión el atractivo era muy grande, no en vano se ofrecía un avance de la nueva ópera de Cristóbal Halffter, llamada a estrenarse en Kiel en mayo de 2008. El texto, obra de Juan Carlos Marset -actual director general del INAEM- narra la resurrección de un Lázaro que, tras la detención de Jesucristo, es perseguido y ha de refugiarse por el resto de su vida en la cueva-sepulcro de la que resucitó. Dado que sólo se escucharon unos 25 minutos de una duración total anunciada de 95, que no se proporcionó el libreto y que no se entendían con nitidez muchas de las frases, es imposible juzgar su calidad literaria. Apunto el consejo que da al resucitado una de sus hermanas por si ayuda a situar la obra: «Come algo allí, abrígate bien, no cojas frió».
Las composiciones de Cristóbal Halffter se caracterizan, entre otras cosas y como en su día apuntó Enrique Franco, por abrirse reconocidamente a muchas influencias, fundamentalmente de nuestro patrimonio de la edad de oro, pero manteniendo siempre una personalidad propia que hace inmediatamente atribuibles a su autor cada una de sus partituras. Sucede también ahora, con unos inicios que esta vez entroncan con la «Elektra» straussiana. La introducción, bastante breve, enlaza directamente con la voz – ocho personajes sin coro- rodeada por una gran densidad sonora orquestal. Opino de nuevo que la mayoría de nuestros compositores vivos no acaban de encontrar el papel y la escritura vocal en la ópera de nuestro tiempo, pero la propuesta de Halffter interesa. Habrá que escuchar la obra entera para saber si estamos ante una ópera, por tanto con predominio de la acción, o un oratorio, con predominio de la reflexión. Los azares del destino han querido que quizá se retrase su estreno en España, ya que al no estar programada aún en ningún teatro, será difícil que pueda abordarse con subvención del INAEM, cuyo director general es coautor. Alguien tendrá que echar imaginación para que se pueda estrenar sin incurrir en incompatibilidades manifiestas.
“La vida breve”, sin duda una ópera, siempre encontró en Frühbeck de Burgos un director ideal, que la comprende, domina y controla en los más mínimos detalles, como la problemática de la medida en el cuadro flamenco. Bailó muy bien Nuria Pomares y María Rodríguez va por buen camino como sucesora en la parte de María Orán, la última gran Salud. La Dresdner Philharmonie y la Coral de Bilbao han cosechado también un enorme éxito en el Festival de Bucarest con este Falla, con plantillas más reducidas en el Principal debido al espacio. Un gran éxito coronado con el himno local cantado por todo el público casi con calidad de auténtico coro. Gonzalo Alonso