Critica: Impresionante Zaratustra, ideal Beethoven en el Palau de la Música con Alexander Liebreich
Impresionante Zaratustra, ideal Beethoven
TEMPORADA 2024-2025 del Palau de la Música. Programa: Obras de Beethoven (Concierto para violín y orquesta) y Strauss (Así habló Zaratustra). Orquestra de València. Solista: Serguéi Jachatrián (violín). Director: Alexander Liebreich. Lugar: Palau de la Música. Entrada: Alrededor de 1.790 espectadores (lleno). Fecha: viernes, 16 mayo 2025.

Serguéi Jachatrián
Impresionante concierto de la Orquestra de València, centrado en una sobresaliente versión de Así habló Zaratustra de Strauss que marca un punto álgido en la evidente línea ascendente en que anda inmersa la formación valenciana desde la llegada a la titularidad de Alexander Liebreich, en 2022. El director bávaro (Ratisbona, 1968), straussiano de ley y director de probadas competencias y saberes, lideró una versión de empaque y calidades; brillante, suntuosa y cargada de fantasía y sentido narrativo.
Impecable instrumentalmente y en la que casi todo rozó la perfección. Para redondear esta tarde de gran música e interpretaciones ad hoc, Serguéi Jachatrián fue artífice ideal de una indagadora versión del Concierto de violín de Beethoven plena de excelencias y sello propio. A tono con la alcurnia virtuosa y artística del solista, la orquesta echó el resto bajo el empático y meticuloso acompañamiento de un Liebreich en día de gracia.
El Zaratustra straussiano es de principio a fin -ambos extremos en pianísimos cargados de expresión y peligro- uno de los retos más comprometidos para cualquier orquesta. El enorme dispositivo instrumental -más de cien instrumentistas sobre el escenario- no agazapa numerosas intervenciones solistas, y otras casi camerísticas.
Desde el timbalero -excepcional en los comienzos tanto del concierto de Beethoven como en Strauss- a la concertino; desde los flautines a las tubas, del órgano a las arpas, del organista a la campana, no hubo músico que desentonara o diera la nota en esta versión que los mismos intérpretes llevarán la próxima temporada al Auditorio Nacional de Madrid y -nada menos- que al Musikverein de Viena, algo que deja de sonar pretencioso tras escuchar esta interpretación inesperada y merecedora de encendidos parabienes.
Fue más que impecable, con nimios deslices que quedaron disueltos en el mar de bondades. Zaratustra pulido, de enormes y calibradas dinámicas, decidido empaque instrumental, en el que todos y cada uno de los músicos pusieron la carne en el asador, a la manera de las mejores orquestas. Todos coprotagonistas de una concertación magistral en la que Liebreich no se dejó arrastrar por la tentación efectista ni el luminoso océano de sonoridades de la opulenta orquestación straussiana. Una reinterpretación considerablemente superior a la ofrecida por la misma orquesta y director en octubre de 2022 en el Auditorio de Les Arts, y a años luz de la escuchada en marzo de 2019 bajo la dirección de Ramón Tebar.
En la primera parte, Jachatrián planteó su personalísima visión del Concierto de Beethoven. De tiempos anchurosos y recreados al detalle, y fraseos matizados al límite. Cuajado de ideas, escuela y tradición. Cantado con efusión lírica y explayado de acuerdo con el sentido expresivo del Beethoven que cuando compone el concierto -1806- ya anda distanciado de lo clásico y volcado en el romanticismo. Fue una versión al límite, con pianísimos corpóreos y rubateos que jamás perdieron estilo ni forma.
Gozosa hasta el éxtasis en el jubiloso rondó final, y que se benefició, además, de las oportunas y estupendas intervenciones del fagot solista. El éxito, como no podía ser de otro modo, enorme. Tras varias salidas a saludar, Jachatrián regaló un tiempo de la Cuarta sonata para violín solo de Ysaÿe, la dedicada a Fritz Kreisler. Seguro que compositor y dedicatario se hubieran quedado tan maravillados como el público que abarrotó la Sala Iturbi este viernes para los anales.
Publicado en el diario Levante el 18 de mayo de 2025
Últimos comentarios