Carlo Bergonzi, sumo tenor verdiano

Hay artistas que están en nuestros corazones más que otros. Este es el caso de Carlo Bergonzi para mi. En dos de mis tres primeros discos figuraba Bergonzi: la «Aida» con Karajan y Tebaldi y el «Rigoletto» con Kubelik y Fischer Dieskau. Estas cosas no se olvidan. Le escuché por vez primera en el Liceo en 1971: «Rigoletto» junto a McNeil y «Forza del destino» junto a Kabaivanska. Fue un sueño cumplido, pero en el verano de 1972 le volví a ver en «Aida» en Verona. En tres días consecutivos cantaron él, Pavarotti -«Ballo»- y Corelli -«Ernani»-. En aquel escenario apareció dieciocho años.

¿Pensaría Verdi que muy próximo a su finca Santa Agata nacería uno de los mejores tenores para sus óperas? A los siete años le llevó su padre a su primera ópera, un «Trovador» cuya «pira» no pararía de repetir en los días siguientes. A los catorce decidió dejar de ayudar a fabricar queso e ingresó en el conservatorio de Parma, donde también estudiaba Tebaldi. Debutó como barítono en un pobre «Barbero de Sevilla» en 1948 pero un día, cantando Sharpless, descubrió que le salía mejor el Pinkerton que al tenor que lo cantaba. Su primer rol de tenor fue Andrea Chenier en 1951. Tuvo la suerte de ser oído por un responsable de la RAI, que iba a programar varias óperas de Verdi a los cincuenta años de su muerte, y le ofrecieron un contrato de cover para todas ellas. Así se convirtió en el tenor verdiano por excelencia, aunque su repertorio fue mucho más amplio, abarcando desde el belcantismo al verismo.

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En 1953 debutó en la Scala y dos años después en el Met con «Aida» y «Trovador». Mario del Monaco le escuchó «Manon Lescaut» en Rovigo y se entusiasmó tanto como para proponerle dos de sus funciones en NY. Alcanzó tal éxito como para figurar en 32 temporadas. El Covent Garden llegó más tarde, en 1962, con su papel verdiano quizá de referencia «Forza del destino». En aquellos años rivalizaban Di Stefano, del Monaco, Corelli, Tucker y él. Fue vocal y vitalmente el más longevo. No tuvo el squillo de del Monaco, ni la pastosidad o los agudos de Corelli, ni el metal de Tucker, ni la belleza de la voz del joven Di Stefano, -«¿Qué hubiera sido mi marido de tener una voz hermosa?» me confesó su esposa Adele- pero fue ejemplo de fraseo, de buen decir -se le entendía cada palabra-, de administración de la respiración, de línea, de inteligencia canora…

Fue abandonando la ópera en los ochenta, para refugiarse en su restaurante «I due Foscari» en Busseto y aparecer brevemente en «Elixir d’amore» y recitales. Cuando, en 1989, puse en marcha el ciclo de música de mi universidad, la Politécnica madrileña, quise que fuera él el primer artista. El concierto fue retransmitido por TV1 y dejó al público asombrado. «¡Jamás he oído cantar así!» se escuchaba tras su «Lamento de Federico». Compensó sobradamente todo el jaleo de intendencia que causó Adele, mudándose tres veces de habitación en el Palace y olvidando las partituras en una de ellas. Tuvimos después una cena muy emotiva, que supuso su reencuentro con Angeles Gulín, ya en silla de ruedas por su diabetes, con quien cantó, entre otras óperas, «Gioconda» en el Liceo.

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En 2000 se quiso enfrentar, en concierto en NY, por vez primera a «Otello», pero no logró acabar la ópera a pesar de que su voz estaba increíblemente fresca para sus setenta y cinco años. En 2010 recibió muchos homenajes. En la Fenice le pidieron regresase. Él respondió: «Discúlpenme, pero tengo ya billete para un viaje muy largo sin fecha y aún no se venden billetes de vuelta para él». No se equivocó en mucho, pero él no ha partido de nuestros corazones y nuestras memorias. Ciao, querido catedrático. Gonzalo Alonso

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Vídeos y entrevistas

Su última entevista

DISCOS:

Verdi: «Aida». Tebaldi, Simionato, McNeil. Orquesta Filarmónica de Viena. Karajan. DECCA

Un lujo orquestal y vocal con un cuarteto inmejorable a pesar de no estar ninguno en plena juventud. Sólo la de Muti, años más tarde, alcanza el mismo nivel.

Verdi: «Forza del destino». Arroyo, Capuccilli, Raimondi. Royal Philharmonic. Gardelli. EMI

Una buena dirección para toda una lección de canto de Bergonzi, en uno de sus mejores papeles. Impresionantes los dúos con Cappuccilli. Arroyo quizá no estuvo a la misma altura.

Verdi: «Ballo in maschera». Price, Verret, Merrill. Orquesta de la RCA. Leinsdorf. RCA

Soberbias interpretaciones de Leontyne Price y Bergonzi. Muy comunicativa la primera y elegantísimo el segundo. Magnífico el resto del reparto bajo una inesperada dirección de Leinsdorf.

Verdi: «Rigoletto». Fischer Dieskau, Scotto, Cossotto. Orquesta de la Scala. Kubelik. DGG

Una sorprendente y nada usual versión. La ópera italiana nunca fue el fuerte de Fischer Dieskau, pero con Kubelik realizó toda una creación. Una joya la joven Scotto. Sobresaliente el «Parmi veder» de Bergonzi.

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REPERORIO Y FECHAS DEBUT (Wikipedia)

• Andrea Chenier-Bari, Petruzzelli, 18 de enero de 1951.
• Giovanna d’Arco-Milán, RAI, 26 de mayo de 1951.
• Pagliacci-Milán, RAI, 10 de junio de 1951.
• La forza del Destino-Milán, RAI, 16 de julio de 1951.
• Un Ballo in Maschera-Milán, Nuovo, 15 de agosto de 1951.
• Simon Boccanegra-Roma, RAI, 21 de noviembre de 1951.
• I due Foscari-Milán, RAI, 5 de diciembre de 1951.
• Adriana Lecouvreur-Prato, Metastasio, 31 de diciembre de 1951.
• Faust-Bari, Petruzzelli, 8 de enero de 1952.
• Jenufa (Steva)-Roma, Opera, 17 de abril de 1952.
• Ifigenia-Nápoles, San Carlo, 1 de junio de 1952.
• Mefistofele -Roma, Caracalla, 1 de julio de 1952.
• Madama Butterfly-Cagliari, All’aperto, de agosto de 1952.
• Masaniello-Milán, Scala, 25 de marzo de 1953.
• Rigoletto-Livorno, Goldoni, 20 de mayo de 1953.
• Aida-Buenos Aires, Colón, 24 de julio de 1953.
• Tosca-Buenos Aires, Colón, 7 de agosto de 1953.
• Manon Lescaut-Rovigo, Sociale, 24 de octubre de 1953.
• Turandot-Catania, Massimo Bellini, 19 de noviembre de 1953.
• Loreley-Reggio Emilia, Municipale, 2 de febrero de 1954.
• L’incorazione di Poppea-Milán, RAI, 7 de marzo de 1954.
• Carmen-Monte Carlo, Salle Garnier, 30 de enero de 1955.
• Lucia di Lammermoor-Brescia, Grande, 3 Fenruary 1955.
• Don Carlo-Buenos Aires, Colón, de agosto de 1955.
• La Traviata-Salsomaggiore, Nuovo, 10 de septiembre de 1955.
• Il Tabarro-Chicago, Lyric, 16 de noviembre de 1955.
• Cavalleria Rusticana-Chicago Lyric, 26 de noviembre de 1955.
• L’amore dei tre Re-Chicago, Lyric, 28 de noviembre de 1955.
• La Gioconda-Trieste, Castello di San Giusto, 16 de julio de 1956.
• Il Trovatore-Nueva York, MET, 13 de noviembre de 1956.
• Fior di Maria-Milán, RAI, 30 de enero de 1957.
• La Bohème-Caracas, Municipal, de octubre de 1957.
• Macbeth-Nueva York, MET, 5 de febrero de 1959.
• L’elisir d’Amore-San Sebastián, Victoria Eugenia, 26 de agosto de 1959.
• Ernani-Nueva York, MET, 26 de noviembre de 1962.
• La Wally– Nueva York, Carnegie Hall, 13 de marzo de 1968.
• Werther-Nápoles, San Carlo, 11 de febrero de 1969.
• Norma-Nueva York, MET, 3 de marzo de 1970.
• Luisa Miller-Génova, Margherita, 20 de septiembre de 1972.
• Edgar-Nueva York, Carnegie, 13 de abril de 1977.
• I Lombardi alla prima Crociata-San Diego, Russ Auditorium, 22 de junio de 1979.
• Il Corsaro-Nueva York, Town Hall, 16 de diciembre de 1981.
• Attila-Tulsa, Chapman Music Hall, 6 de marzo de 1982.
• Otello-Nueva York, Carnegie Hall, 3 de mayo de 2000.