China desaparece del mapa

Merman las giras en el continente y se somete a examen a los músicos asiáticos

Andris Nelsons y Gianandrea Noseda

La emergencia internacional por el coronavirus alcanza a las instituciones de música clásica, que como método de prevención tomarán todas las medidas posibles para evitar el posible contagio entre músicos y personal.

El pasado 30 de enero, la Orquesta Sinfónica de Boston emitía un comunicado en el que confirmaba la anulación de su gira junto a Andris Nelsons por el este asiático– que comprendía las ciudades de Seúl, Taipei, Shanghai y Hong Kong -. Esta estaba programada desde el pasado día 6 hasta el 16 de febrero.

También Gianandrea Noseda y la National Symphony Orchestra han cancelado 3 fechas en China en su gira asiática, aunque sí visitarán Japón, siendo la primera formación americana en visitar Hiroshima en los últimos 50 años.

«La National Symphony Orchestra y Gianandrea Noseda lamentan profundamente la anulación de los conciertos en Beijing y Shanghai el próximo mes», ha explicado Gary Ginstling, director ejecutivo de la Orquesta. «La creciente alarma sobre la propagación del coronavirus ha llevado al Centro de Control de Enfermedades y al Departamento de Estado de los Estados Unidos a extremar las precauciones. Las principales aerolíneas americanas han cancelado sus vuelos a y desde China hasta finales de marzo, incluyendo aquellos que iban a transportar a la Orquesta hasta ambas ciudades. Por tanto, debido a problemas logísticos y la probabilidad de exponer a los músicos a un posible contagio, las actuaciones programadas no podrán llevarse a cabo. La Orquesta volverá a organizar una visita a China tan pronto como sea posible y dedica sus pensamientos a aquellos afectados por la emergencia sanitaria mundial».

Por otro lado, los 160 profesores del Conservatorio de Roma Santa Cecilia recibieron a finales de mes otro mensaje de la dirección en la que se advertía de la suspensión de las lecciones de los alumnos orientales hasta que el doctor del Conservatorio no aprobase su estado de salud.