El compositor, comentarista y gestor Tomás Marco volverá a desempeñar labores de crítico musical. Se alternará durante un tiempo en la crítica sinfónica con Carlos Gómez Amat, para luego suceder a quien ha desempeñado este puesto en El Mundo con pleno acierto, criterio y amenidad. No lo tiene fácil Marco puesto que –espacio disponible en el diario aparte- Gómez Amat deja el pabellón muy alto. Pero Marco es persona con criterio, inteligencia y sentido del humor y puede realizar una buena labor ahora que no está comprometido en actividades paralelas. Vamos, que no tendrá necesidad, como en tiempos pasados, de escribir en tercera persona la crítica de un concierto organizado por él, con la orquesta en la que es máximo responsable y en el que se estrena una obra suya.
El propio Gómez Amat podría haber sugerido el nombre de su sucesor, toda vez que este puesto no lo pudo ocupar su sobrino José Luís Turina. En cualquier caso Tomás Marco estuvo ligado a Diario 16, antecedente de El Mundo.
Al parecer la crítica operística seguirá siendo desempeñada por Álvaro del Amo.
Esperemos que Marco se las apañe para conseguir más espacio en la sección de espectáculos. Bienvenida sea su firma de nuevo a la crítica musical.