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Por Publicado el: 18/09/2008Categorías: Artículos de Gonzalo Alonso

Sarasate versus Iberni

Sarasate versus Iberni
El día 20 se cumplirán cien años de la muerte de Pablo Sarasate. Falleció a los 64 años en plenitud de una fama que hoy día nos es difícil imaginar. Nuestro amigo y colaborador en estas páginas Luis Iberni publicó en 1994 un estupendo libro sobre él que esperaba ampliar cuando la muerte le sorprendió aún más joven que al violinista-compositor. Iberni dividía su producción en fantasías y reminiscencias de óperas, piezas de salón de corte francés, fantasías y melodías basadas en piezas populares europeas y composiciones basadas en el folclore hispano. Sus piezas, brillantes hasta el exhibicionismo, escritas para la burguesía de la época chocaron con el cambio de coordenadas musicales en aquella Europa de Falla, Debussy e incluso Schönberg, lo que impidió su estima como autor, siéndolo mucho más como violinista. Una crítica de la época describía “Justeza absoluta, mecanismo irreprochable, arco firme, vigoroso y variado, seguridad prodigiosa de ejecución, estilo lleno de grandeza y de expresión. Podría deseársele un sonido más poderoso, un poco más vigoroso, pero no se puede pedir más claro, más limpio y más puro”. Fue, desde luego, un gran virtuoso que, como escribía Iberni, “se comportó como casi todos sus colegas desde Thalberg o Liszt, entre los pianistas, hasta Ernst, Bassin, Wieniaswskio Vieuxtemps, sin olvidar al legendario Paganini, entre los violinistas”. Alcanzó en vida tanta fama que Lalo, Saint-Saens o Bruch escribieron obras para él. Su modo de pensar queda retratado por una de sus frases sobre el “concierto para violín” de Brahms: “No niego que sea una música muy hermosa, pero ¿imagina alguien que tengo tan mal gusto como para permanecer de pie en la tarima, violín en mano, escuchando al oboe tocar la única melodía del adagio?”
Donó al Conservatorio de Madrid el más viejo de sus dos Stradivarius, regalo de Isabel II y, amante de los San Fermines, fundó la hoy Orquesta Sinfónica de Navarra Pablo Sarasate y entonces Orquesta Santa Cecilia, probablemente la más antigua de España, que se encargará de recordarle en un DVD que llegará hasta Japón. ¡Qué pena que Luis Iberni no pueda estar en Pamplona o Biarritz el día 20! Pero él tendrá también su homenaje. Será en Oviedo el 11 de octubre.

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