Riccardo Muti entró en el camerino de Carlos Álvarez, con quien trabajaba en Viena en «Bodas de Fígaro», para decirle: «Carlos, ya puedes decir que eres el mejor barítono, te acaban de otorgar la distinción Meistersinger». Afortunadamente Álvarez ya se ha recuperado tras la afección vocal que le ocasionó el aire acondicionado de un teatro de ópera español y mediterraneo.

Se presentó el próximo festival de Cuenca. En el acto estuvo Antonio Moral -se supone que de despedida- pero a él no fueron invitados ni Claudio Nohales ni Juan Antonio Llorente, que se habían ocupado de labores de prensa y relaciones públicas en ediciones anteriores. Ni se les llamó con anterioridad para decirles que ya no contaban con ellos. El primero ha sido trasladado al Ayuntamiento. Por cierto, ¿quién es Stefano Arata» al que se llevan dedicando en el programa del festival las cuatro o cinco últimas ediciones? Simple curiosidad, porque uno creía que sabía todo, pero no. O quizá sí.